jueves, 1 de noviembre de 2018

Los colgantes bicónicos de bronce en la Prehistoria de Menorca.

Artículo sobre colgantes bicónicos en la prehistoria de Menorca

  Recientemente la revista MATerialidadeS, Perspectivas actuales en cultura material, editada por la UIB, ha publicado un articulo elaborado por mi, a raíz del estudio que realicé sobre los denominados "colgantes bicónicos". Són unos objetos muy peculiares, característicos de la prehistoria de Menorca y que solo se han localizado, por el momento, en la isla de Menorca. Son por tanto, objetos genuinos, únicos y propios de la cultura talayótica menorquina. 

 Fabriccados con aleación de bronce o incluso de plomo, están formados por dos troncos de cono unidos por la base, dejando un espacio cónico-tubular que atraviestodsu longitud. Deben su nombre al engrosamiento bicónico de su partcentral. Este objeto parece habersfabricado a partir de una única piezrealizadcon un molde de fundición de dos valvas, aunque no es descartable que algunas piezas –especialmentlas más complejas- estén fundidas a lcerperdidaSerá necesario llevar a cabo análisis de rayos X para determinar su estructura interior, y precisar más sobrsfábrica y confección. En unos pocos casos, se ha conservado un apéndice terminal en forma de bola esférica unida a un vástago de forma rectangular, en cuyo extremo se localiza un agujero a modo de ojal. Esta circunstancia lleva a pensar que un cordel o ligazón que discurría por el interior de la pieza, mantenía unida la bola a la pieza bicónica, permitiendo por tanto su movimiento y sujeción de ambas piezas al mismo tiempo. 

Este tipo de objetos aparecen mayoritariamente en yacimientos funerarios, tanto en cuevas naturales con muro ciclópeo (Calascoves, cuevas LXXVIII, Es Càrritx, Cova des Mussol), como en hipogeos de planta sencilla (Calascoves, hipogeos XI, XXII, LXXVIII, LXXX), aunque también se ha localizado un ejemplar en el asentamiento de naviformes de Clariana (Plantalamor, 1991: 24), y otro en el asentamiento de Trebalúger (Gual, et alii, 1991)En el sepulcro de triple paramento de Son Olivaret (Plantalamor et alii, 2008) se localizaron tres ejemplares elaborados sobre diferente materia prima (calcita, plomo y bronce). Son interesantes tanto las presencias como las ausencias de bicónicas en determinados yacimientos. Uno de las cuevas menorquinas paradigmáticas, la excepcionalmente bien conservada Cova des Pas (Fullola et alii, 2007), no aportó ni un solo ejemplar de bicónica, lo que puede servirnos para hipotetizar sobre el uso temporal de estos objetos.

Desconocemos, sin embargo, la situación y emplazamiento original de estas piezas y su papel en los ajuares funerarios depositados en el interior de las tumbas, así como los contextos arqueológicos concretos con los que se asocian. ELa naveta de STorreta, Murray localizó un bicónico junto al tórax de un individuo (Murray, 1934: 27), mientras que Veny localizó otro junto a una clavícula en la naveta de La Cov(Veny, 1992).
 Ela Covdes Mussol (Ciutadella) se localizó una bicónica entre los contextos de un enterramientcolectivo (Lull et alii, 1999)Ldatación radiocarbónica del nivel II de lsala 1 nos indica que estos objetos pudieron usarse torno a la transición del II y el I milenio cal ane, aunque como también señalan estos autores, citando a Veny (1982: 312-314), pudieron estar en uso en algunos hipogeos de planta sencilla de Calascoves hasta el siglo VIII-VII ane. Sin embargo, es muposible que los hipogeos del Tipo I de esta necrópolis, en los que se documentaron colgantes bicónicos puedan definirscomo las tumbas más antiguas dentro de sgrupo tipológico (como el hipogeo nº 11 y el hipogeo nº 80), puesto que en ninguna de ellas se localizaron utensilios de hierro, cuya presencia en Menorca puede rastrearse hasta inicios del primer milenio ane, a tenor de los datos proporcionados por Es Forat de Ses AritgesSegún Lull (et alii 1999: 117), los paralelos formales más próximos a estas piezas se sitúan en el Midi francés, donde se documentan objetos de un gran parecido formal con los menorquines. Sin embargola cronología de las cuentas francesas se datan en el calcolítico-, pone un interrogante más sobre estas piezas menorquinas, puesto que hay una gran distancia cronológica entrlas piezas del sur de Francia y las menorquinas.

Las bicónicas no son objetos exclusivamente funerariosEn los naviformes de Clarianasrecuperó un ejemplar de pequeño tamaño, así como otro en el hábitat de Trebalúger, en Es Castell (Plantalamor et alii, 2009), por lo que a pesar de que cuantitativamentse han localizado muchos más en ambientes funerarios, no puede decirse que sea un objeto de “uso” exclusivo funerario, aunque su “vocación” mayoritaria sea esa.
  El análisis comparativo de los contextos arqueológicos y de dataciones radiocarbónicas de la Cova des Carritx y la Cova des Mussol, los sepulcros de Ses Arenes de Baix y Son Olivaret, y los hipogeos VII y IX de Calascoves, podría situar su uso general entre el 1200 y el 800 cal ane, coincidiendo con el uso generalizado –primero- y abandono –después- de las navetas funerarias y las cuevas naturales con muro ciclópeo, tal y como parece apuntarse en la Cova des Pas. 

  Evidentemente, no es la primera vez que se estudian y analizan estos objetos. Cristobal Veny, Luis Plantalamor-Massanet, o el equipo de la UAb, son algunos de los investigadores que han dedicado varios articulos a la descripción e interpretación de estos interesantes objetos. Sus conclusiones apuntaban hacia un objeto claramente original, pero de función decorativa. Veny lo definía como cabeza de cetro o colgante, y Plantalamor lo situaba más como un pasador vinculado con la vestimenta. Todos coincidimos en la cronología de estos elementos. Hay que situarlos entre el 1100 y el 800 cal a.C.

Sin embargo, el enfoque que nosotros le damos es distinto. En primer lugar, porque se lleva a cabo un análisis morfométrico de todas las piezas conocidas por el momento. Eso significa que se miden, pesan y tabulan todos los parámetros métricos de estos objetos para elaborar una base de datos que pueda ser computada y analizada matemáticamente. En segundo lugar, se analiza su composición, morfología y estructura interna con diferentes análisis: de difracción, de rayos X, estadísticos. Todo ello con el objetivo de obtener el máximo de información sobre estas piezas. 

 Los resultados preliminares apuntan a que estos objetos no son tanto decorativos como instrumentales. Es decir, este objeto es más un instrumento -o forma parte de un instrumento más complejo, elaborado con materiales perecederos que no han perdurado- que un objeto decorativo. 
Nos ha faltado tiempo para hacer un nuevo análisis: el experimental. Nuestro próximo objetivo es reproducir uno de estos instrumentos, y experimentar acciones y movimientos con el. En las conclusiones preliminares apuntábamos a que este objeto pudiera ser un ponderal o elemento similar, a tenor de las medidas estándar con los que se fabricaban en toda Menorca. Hay hasta tres tamaños estándar de estas piezas, determinadas perfectamente por los análisis estadísticos y morfológicos aplicados, lo que nos lleva a pensar que el peso y la forma eran importantes a la hora de su manejo. 
sin embargo, deberá ser la arqueología experimental la que pueda darnos mas luz e información sobre este enigmático objeto. El ingenio de los artesanos talayóticos puede descubrirse con la determinación funcional de este instrumento. 

Para saber más: 
GORNÉS HACHERO, J.S; (2016). Sociedad y cambio en Menorca: sistematización de los contextos arqueológicos de las navetas funerarias entre el 1400 y el 850 cal ane. Tesis Doctoral. Universidad Autónoma de Barcelona. ISBN: 9788449066122.
 GUERRERO, V.M; CALVO, M; GARCÍA, J; GORNÉS, S. (2007) Prehistoria de las Islas Baleares. Registro arqueológico y evolución social antes de la Edad del Hierro. BAR International Series 1690. Oxford.
LULL, V. MICÓ, R. RIHUETE, C. RISCH, R. (1999). La Cova des Càrritx y la Cova des Mussol. Ideologia y Socieclad, en la Prehistoria de Menorca. Barcelona. Consell Insular de Menorca.
MONTERO, I.; GORNÉS, J.S.; DE NICOLÁS, J.; GUAL, J. (2006). “Aproximación a la metalurgia prehistórica de Menorca entre 2000 y el 650 cal. aC.”  Mayurqa 30, Palma, pp. 289-306.
PLANTALAMOR MASSANET, Ll. (1991a). L’arquitectura prehistòrica y protohistòrica de Menorca y el seu marc cultural. Treballs del Museu de Menorca, 12. Maó.
PLANTALAMOR MASSANET, Ll., SASTRE MOLL, J.; VILLALONGA GARCIA, S. (2009). “Les llàgrimes bicòniques a l’Illa de Menorca”. En Revista Randa, nº 62. Volumen dedicado a Miscel·lania Gabriel Llompart, II. Ed. Publicacions de l’Abadia de Montserrat. Barcelona. Pgs. 5-29.
 VENY MELIÁ, C. (1982). La necrópolis protohistórica de Cales Coves, Menorca, Bib. Preh. Hisp., XX Madrid.
VENY MELIÁ, C. (1992). Las navetas de Menorca. A “La Sardegna nel Mediterraneo tra il Bronzo Medio e il Bronzo Recente (XVI-XIII Sec. a.C.), 1987. Selargius-Cagliari. pp.443-472.


Bicónico localizado en el hipogeo IX de Calascoves (Alaior)



Bicónico de la naveta de Binimaimut (Mahón)

Análisis rayos X sobre uno de los bicónicos

Análisis  rayos X sobre un bicónico con esfera terminal.

Bicónico de S'Alblegall, Ciutadella. Museu de Menorca.


Clasificación de los colgantes bicónicos, según S. Gornés. 

Diagrama de cajas de los colgantes bicónicos, según S. Gornés.

Gráfico de correlaciónes de las bicónicas, según S. Gornés